El Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC) es un problema que afecta a millones de personas en todo el mundo, impactando tanto en su bienestar emocional como su calidad de vida. Este trastorno se caracteriza por la presencia de obsesiones (pensamientos intrusivos y angustiosos) y compulsiones (conductas repetitivas o rituales) que las personas realizan para aliviar la ansiedad generada por las obsesiones.
En muchas ocasiones nos encontraremos con pensamientos obsesivos y rumiantes sin la parte compulsiva. Este articulo, aunque intenta explicar un poco el TOC tambien seria adecuado para aquellas personas que no presentan la parte compulsiva.
El TOC es un trastorno de ansiedad caracterizado por la presencia de obsesiones y compulsiones.
Las obsesiones son pensamientos, impulsos o imágenes mentales persistentes que causan ansiedad o malestar.
Las compulsiones son comportamientos o actos mentales repetitivos que una persona realiza para reducir la ansiedad provocada por las obsesiones o para evitar que ocurra algo temido, aunque estos actos no estén relacionados de manera lógica con lo que tratan de evitar.
Por ejemplo, una persona con TOC puede experimentar la obsesión de que va a dejar de respirar (obsesión) y, para aliviar la ansiedad que le produce este pensamiento, realiza una compulsión que puede tener o no relación con el tema de la obsesión. Ejemplo de compulsión relacionada: tocarse la nariz para comprobar que enra el aire. Compulsión no relacionada: saltar cinco veces.
Algo muy importante a tener en cuenta en este tipo de trastorno es que todo puede ser motivo de obsesion y a la vez, cualquier cosa puede convertirse en compulsion.
Cuando hablamos de TOC solemos pensar habitualmente en limpieza, orden o verificacion. Sin embargo, hay muchisimas obsesiones mas que nos encontramos en terapia. Voy a poner algunos ejemplos:
Tambien las compulsiones pueden ser variadisismas. Veamos ejemplos que nos hemos encontrado en sesion:
Recordemos que la compulsiòn se utiliza para reducir la ansiedad que nos produce la obsesión pero tambien podemos tener compulsiones para calmar la ansiedad fuera del marco obsesivo como por ejemplo en la tricotilomania (arrancarse el pelo), Onicofagia (morderse las uñas) y otras patologias.
El TOC puede afectar gravemente la vida de quienes lo padecen, causando dificultades significativas en su vida diaria. Las personas con TOC a menudo experimentan:
El tratamiento del TOC generalmente combina terapia psicológica, medicamentos y, en algunos casos, intervenciones más intensivas. Aunque no existe una cura definitiva para el TOC, los enfoques terapéuticos son muy efectivos para controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida.
La Terapia Cognitivo-Conductual es uno de los tratamientos más utilizados para el TOC. Dentro de la TCC, la Exposición y Prevención de Respuesta (EPR) es un enfoque especialmente utilizado para el TOC. Consiste en exponer gradualmente al paciente a sus obsesiones sin permitirles realizar las compulsiones.
En Psicología CGM pensamos que esta terapia queda muy corta y suele tener el efecto de simplemente modificar la obsesión y compulsión dándoles una nueva forma.
Por ejemplo: persona con obsesión a colocar las toallas. No se le permite. Días después le surge una nueva obsesión; limpiar cada azulejo.
Suele funcionar sólo con cuadros muy leves.
Con esta terapia buscamos el origen que causa la sintomatología TOC. Entendemos el TOC como una respuesta de la mente humana al no poder controlar diferentes sucesos. Los humanos necesitamos controlar las variables para sentirnos seguros. Si sucede algo que nos es imposible controlar puede darse fácilmente este tipo de sintomatología. El TOC funciona como una defensa del sistema que nos protege de un mal mayor. Cuando ese «mal» ya no esta , la parte TOC sigue creyendo que existe y seguira actuando. Desde el EMDR tratamos de buscar en que momento nuestro sistema necesitó esa protección y tratamos de bajar dicha defensa puesto que de aquello que nos protegia quizás ya no se este dando o podamos tener otras estrategias mas saludables para afrontarlo.
Esta terapia es mucho más útil con cuadros graves con sintomatología TOC.
Los medicamentos pueden ser utilizados para tratar los síntomas del TOC, especialmente cuando la terapia sola no es suficiente. Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), como la fluoxetina, sertralina o fluvoxamina, son comúnmente recetados, ya que ayudan a equilibrar los niveles de serotonina en el cerebro, lo que puede reducir las obsesiones y compulsiones.
Beneficios: Los medicamentos pueden ser efectivos para reducir la intensidad de los síntomas, permitiendo que el paciente se beneficie más de la terapia.
El tratamiento del TOC puede ser un proceso largo y desafiante, pero con el enfoque adecuado, es posible controlar los síntomas y mejorar significativamente la calidad de vida. Si crees que puedes estar experimentando síntomas de TOC o si ya has sido diagnosticado, es crucial buscar ayuda profesional. En Psicología CGM, nuestro equipo de especialistas está preparado para brindarte el apoyo necesario para comenzar tu camino hacia la recuperación. Ya sea a través de terapia, medicación o una combinación de ambos, podemos ayudarte a recuperar el control y a vivir una vida más plena y satisfactoria.
Si deseas obtener más información o iniciar tu tratamiento, no dudes en ponerte en contacto con nosotros pinchando aqui.
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