El poder de la palabra (Fábula de la rana)

Un grupo de ranas viajaba por el bosque y de repente, dos de ellas cayeron en un hoyo profundo.

Todas las demás se reunieron alrededor del hoyo y les dijeron a las dos del fondo que a los efectos prácticos se debían dar por muertas.Ninguna de las dos ranas hizo caso de los comentarios de sus amigas y siguieron tratando de saltar fuera del hoyo con todas sus fuerzas.

Las otras ranas seguían insistiendo en que sus esfuerzos serían inútiles, que hiciesen lo que hiciesen jamas lo lograrían y que era mejor dejar de luchar. Finalmente una de las ranas puso atención en lo que las otras decían, decidió que tenían razón y que no merecía la pena el esfuerzo agotador y se rindió. Finalmente se desplomó y murió.

La otra rana continuó saltando tan fuerte como le era posible. Una vez más, la multitud de ranas le gritó que dejara de sufrir y simplemente se dispusiera a morir. Pero la rana saltó cada vez saltaba con más fuerza hasta que finalmente salió del hoyo.

Cuando salió, las otras ranas le preguntaron: – ¿ No escuchaste lo que te decíamos ?
La rana les explicó que era sorda. Ella, al ver los aspabientos del resto de las ranas y que no paraban de gritarle pensó que las demás la estaban animando a esforzarse más y más para salir del hoyo.

MORALEJA:  La lengua tiene poder de vida y muerte.
  • Una palabra de aliento compartida a alguien que se siente desanimado puede ayudar a levantarlo y finalizar el día.
  • Una palabra destructiva a alguien desanimado puede ser que acabe por destruirlo.  (Como la rana que de tanto escuchar que era IMPOSIBLE conseguirlo y que dejase de luchar porque no iba a ser capaz de lograrlo decidió rendirse. Probablemente las ranas que estaban fuera no se veían capaces de salir del agujero, lo verían como algo imposible y por eso decidieron que esas ranas tampoco…sin embargo la rana que no les escucho y que, ademas, pensó, que la estaban animando logro salir…así que no era imposible conseguirlo tan solo era difícil)

Tengamos, pues, mucho cuidado con lo que decimos a los demás pero también con lo que escuchamos hacia nosotros mismos. No siempre es bueno prestar atención a lo que nos dicen. Quedémonos con aquello que creemos que puede sernos útil ya sea como apoyo o como manera de cambiar y aprender y desechemos todo aquello que provenga de celos, cobardía, envidia..que ni nos ayudara a salir adelante ni nos enseñará nada.

Si tienes un problema que te esta hundiendo, por favor, no dejes de luchar. Somos muchas las personas las que nos hemos formado y que nos dedicamos a no dejar que te rindas y a lanzarte esa «rama» para que te agarres y poder, con la fuerza de ambos, salir adelante. Si decides salir de ese agujero y quieres que te ayude a ello puedes contactar conmigo aquí.

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