Comienza, un año más, la navidad. Una época a veces teñida de lluvia, pocas veces de nieve, pero siempre de frío.
La navidad en nuestra cultura implica luces, decoración, compras, regalos, comidas, cenas….
La navidad es una época especialmente complicada para las personas. En estas fechas muchas veces nos invade la tristeza, la nostalgia…y se hacen más patentes las ausencias.
Hay determinadas fechas que implican comidas o cenas familiares y es ahí, en esos momentos donde pueden ser más claras las ausencias
Paseamos viendo las luces y escuchando los villancicos, vamos con amigos, familiares o niños…la gente suele estar especialmente amable (debería ser así todo el año) …fotos con el gorrito de papa Noel, figuritas para el belén o bolas mágicas para que el árbol nos quede bien.
Llega la cena de nochebuena, la comida de navidad…tras haber decidido con quienes nos juntamos ponemos la mesa…observamos esa mesa y contemplamos que papa ya no está…o mama…o quizás ninguno de los dos. Puede no estar nuestro hermano o quizás es una hija la que nos falta. Todas son ausencias difíciles, complicadas de ignorar.
Fotos puestas cerca de la mesa nos recordaran a aquellas personas que ya no están pero que tampoco estamos dispuestas a olvidar. Personas que nos hicieron reír, sonreír y a veces enfadar pero que sin duda alguna fueron importantes en nuestras vidas. podemos colocar esas fotos, acercarles una bola o quizás espumillón, situarles en sus zonas favoritas….
Pero una vez que hemos hecho esto, una vez que les hemos dado el lugar que queríamos en el momento en que hemos acabado de ataviar esas fotos que os parece si, simplemente, levantamos los ojos, nos dirigimos a la mesa y observamos todas esas sillas que ocupadas están. Puede que aun viva tu padre quizás también tu madre…puede que tengas una hermana o quizás una cuñada. Quizás tan solo un hermano anda por ahí y tus hijos juegan con los primos. Faltan muchos otros, pero todos esos están…disfruta de cada segundo de ellos, ríe, llora, ama cada segundo porque la vida nos ha enseñado que 365 días dan para mucho
Recordemos con amor a aquellos que nos dejaron, pero no nos olvidemos de amar a aquellos que tenemos presentes porque quizás un día sean solo una foto más. Antes de que llegue ese día seca tus lágrimas, sube la curvatura de tu boca y abraza a todos aquellos que aun puedes abrazar.
¡Os deseo una muy feliz navidad!